Versión CD de boulesis.com. Click para saber más  

filosofía, deliberación y pensamiento

Boulesis.com · Página inicial · Filosofía, deliberación y pensamiento
Estás en Boulesis > Didáctica > Apuntes > 2º Bachillerato > Filosofía > Apuntes sobre Descartes
Apuntes. Material educativo para filosofía

Apuntes sobre Descartes

Envió: Jaime Irurzun

Resumen de los aspectos más importantes del pensamiento de René Descartes

1. Biografía y época

René Descartes (1596-1650) nació en Francia y estudió filosofía, medicina y derecho.

Vivió en una época importante en varios aspectos:

En el campo filosófico, se dieron 2 movimientos:

2. Obra

La obra de Descartes se caracteriza porque su pensamiento no cambia, sólo lo depura cada vez más. Destacan el “Tratado del mundo”, el “Tratado del hombre”, y sobre todo, las “Meditaciones metafísicas”, en cuyo prólogo publicó el “El Discurso del método”.

3. Pensamiento

3.1. METAFÍSICA

Ante la falta de fundamento científico del momento, Descartes comienza su pensamiento planteándose el proyecto de unificar las ciencias en lo que él representa como un árbol jerarquizado, cuyas raíces firmes y seguras serían la metafísica (filosofía), el tronco la física, y la extensión de las ramas el resto de ciencias.

Coincide por tanto con el objetivo del Círculo de Viena, aunque estos autores preferirán la física como camino principal.

3.2. MÉTODO DE LA DUDA

Para construir ese árbol imaginario, comienza buscando en la metafísica un punto de apoyo firme y seguro, una verdad absoluta en la que pueda basarse para continuar ascendiendo. Para ello, idea un método que le sirva de guía: el método de la duda o de la evidencia. Consta de 4 reglas:

  1. R. de la Evidencia: Aceptar como verdadero solamente lo evidente (intuitivo). Todo lo evidente ha de poseer 2 características: Claridad y Distinción.
  2. R. del Análisis: Dividir los problemas en partes simples, no abordarlos de forma compleja.
  3. R. de la Síntesis: Una vez analizadas las partes sencillas, recomponer el problema complejo y confirmar o no su validez.
  4. R. de la Enumeración: Revisar (enumerar) todos nuestros pasos para asegurarnos de que no nos hemos equivocado.

3.3. PROCESO DE LA DUDA

Ya que mantiene como máxima sospechar sobre todo considerándolo falso en un primer momento, en su camino hacia una verdad absoluta atraviesa 3 etapas conocidas como el “proceso de la duda”:

  1. Duda de los sentidos: Pone en duda la información que nos ofrecen los sentidos, las cualidades de los objetos (ya que son las que vemos que varían), no su existencia.
  2. Duda de los objetos físicos: Pasa a dudar también de la existencia de los cuerpos (incluido el nuestro), basándose en la hipótesis del sueño ya enunciada por Calderón de la Barca en “La vida es sueño”: puede que la vida sea un sueño tan sueño como los que tenemos y creemos ciertos mientras en ellos estamos, pero de cuya falsedad no somos conscientes hasta despertar.
  3. Duda de la razón: Finalmente duda también de nuestra capacidad racional, exponiendo la hipótesis del Genio maligno o Dios engañador: podría existir un ser todopoderoso que nos engañara y se riera de nosotros al ver cómo creemos estar en lo cierto, a la vez que nos impide razonar correctamente.

Tras atravesar estas etapas, encuentra una verdad indudable con la que ni el supuesto genio maligno podría estar engañándole: que él es porque piensa [“pienso, luego soy”]. Esta verdad evidente (no deducida) no es refutable ante la posible existencia de un genio maligno, puesto que éste solo podría impedirle que cuanto piensa sea verdadero, pero no que piense (y por lo tanto, sea):

A partir de ahora el fundamento del hombre deja de ser Dios para pasar a serlo el hombre (fundamento humano), por lo que acaban las teologías en la ciencia (comienza a morir Dios) y cobran importancia las ciencias humanísticas.

3.4. EXISTENCIA DE DIOS

El problema que encuentra Descartes es que si existiera un Dios maligno, ya no podríamos seguir razonando más allá de esta primera verdad recién descubierta (“yo pienso”), ya que todo lo que pensáramos podría ser falso. Por lo tanto, ante la necesidad de poder fiarse de su razón, trata de demostrar la existencia de un Dios Bueno como garantía mediante 3 argumentos basados en la idea innata de perfección (divide las ideas en adventicias [parecen provenir del exterior], facticias [provienen de la imaginación] e innatas [son creadas espontáneamente por la razón]):

Una vez demostrada la existencia de un Dios, le queda demostrar su bondad. Para ello equipara la verdad a la perfección, y la mentira a la imperfección: como Dios es perfecto, tiene que decir la verdad, por lo que es Bueno.

Esto le permite rehacer el camino recorrido en el proceso de la duda, ya que tras demostrar la existencia de un Dios bueno, puede fiarse de su razón, al igual que puede fiarse de los objetos físicos, e incluso de algunas cualidades de éstos. Al igual que Galileo, distingue 2 tipos:

Y finalmente, afirma que el mundo está compuesto por 3 sustancias, a cada una de las cuales asigna un atributo: a Dios, la Infinitud, ya que no tiene ningún límite; al Alma, el Pensamiento, ya que no deja de producir ideas; y al Cuerpo, la Extensión, ya que es tridimensional y ocupa un volumen.

3.5. FÍSICA

Influenciado por Galileo, Descartes cree que en el mundo material sólo importan 2 cosas: de qué materia está compuesto el universo (materia indefinida), y el movimiento que le ha sido asignado (enuncia 3 leyes casi enunciadas previamente por Galileo).

Pero lo más destacable de su obra física es su concepción mecanicista del mundo: trata al Universo como una gran máquina, formada por materia compacta que lo ocupa todo (lo que llamamos vacío es en realidad éter) y que forma torbellinos que pegan unos con otros. A su vez, dice que los cometas no son más que trozos de materia que han salido despedidos de un torbellino debido a la fuerza centrífuga y que son absorbidos por otro. Por último, afirma que los cuerpos son artefactos, entre los que distingue: los animales [sin sentimientos ni libertad] y los humanos [con sentimientos y libres].

3.6. ANTROPOLOGÍA

Como partidario del dualismo, Descartes separa al hombre en 2 partes (cuerpo y alma) heterogéneas. Al cuerpo le atribuye todas las características explicadas en su concepción mecanicista de la física, y al alma le asigna 2 facultades:

Esta última es la que le diferencia del resto de los animales, ya que es libre (puede elegir) y se le pueden pedir responsabilidades. Caracteriza a esta moral que poseemos como privada y conservadora, y enuncia 4 mínimos éticos que nos ayuden a elegir correctamente a la hora de tomar decisiones:

  1. Acatar las leyes y costumbres vigentes y seguir las opiniones más moderadas.
  2. Ser firme y decidido al actuar.
  3. No desear nada que no se pueda alcanzar.
  4. Intentar cultivar la razón

De esta separación entre cuerpo y alma, le surge el problema de comunicación de las sustancias: de las 3 sustancias que hay (Dios, cuerpo, alma), el ser humano tiene cuerpo y alma. Pero, ¿cómo pueden comunicarse dos partes consideradas independientes pero aparentemente juntas? A este problema intentan responder Descartes y otros 2 autores: Malebranche y Leibniz: